Sin límites

   La peli de ayer, por abrumadora mayoría fue Sin Límites, con Bradley Cooper, Robert de Niro y Abbie Cornish. Eddie Morra es un aspirante a escritor con un bloqueo crónico al que todo le va mal, su novia lo abandona, su apartamento está asqueroso, su editora no le contesta, su casero lo acosa por el alquiler... hasta que un día se encuentra con un viejo amigo, que le da una pastilla transparente. Con ella, Eddie es capaz de sacar de su cerebro un rendimiento total: recuerda todo lo que ha leído, sus conexiones neuronales funcionan a velocidad de vértigo y es capaz de entender o aprender cualquier cosa en apenas unas horas. Su vida da un giro de 180 grados en un solo día. Necesita más pastillas, pero el suministro es muy limitado y todo el mundo quiere más.
   Es una película interesante, con un ritmo bastante ágil, que evita que te aburras. El tema es de lo más curioso y al terminar te preguntas ¿dónde venden esas pastillitas? ¡Yo las quiero!
   Una de las cosas que más llama la atención, al menos a mí, es el color de ojos del protagonista, madre mía, que azules, tiene unos ojos preciosos, suponiendo, claro, que no sean lentillas, porque no recuerdo haberme fijado en ellos en otras series o películas en las que participó.
   El punto negativo, demasiado gráfica con las vomitonas y "bebidas" del protagonista.
   En general, me gustó, Robert de Niro está imponente, como siempre, y la trama es bastante sólida, no deja cabos sueltos, acaba explicando todos los puntos, lo cual siempre es de agradecer y además es interesante y fácil de seguir. Una buena elección.